Cuando se desarrolla un debate, es natural hablar de la participación de dos personas o dos o más grupos de personas con ideas contrapuestas respecto a un tema en concreto, por lo que la existencia de un moderador es imprescindible para poner orden en el evento y para regular la participación igualitaria de todas las partes.
En muchas ocasiones, un moderados no solo se limita a las tareas protocolares de u debate, sino que también puede llegar a ser un intermediario que ayude a definir los pros y contras de cada postura para llegar a una conclusión en la que todos los participantes estén de acuerdo, pues un debate tiene la finalidad de sacar todo lo bueno de cada postura y, de esa manera, encontrar soluciones para la o las problemáticas que implica el tema a bordo.
De esta manera, un moderador es quien define los momentos exactos en los que debe hablar cada participante, siguiendo un orden preestablecido y prevaleciendo las reglas del debate, ya sea que estemos hablando de un debate escolar, un debate universitario o uno de carácter político y de interés social.
Características de un moderador
El moderador es la persona que establece los turnos de participación y los tiempos de intervención en el debate, además garantiza que el tema en discusión no sea distorsionado o desviado. Por otra parte, es él o ella quien establece los temas y subtemas a tratar y el orden en el que se tocarán.
El moderador, como bien se mencionó anteriormente, también puede ser un intermediador o conciliador, por lo que debe ser una persona imparcial, sobre todo en el momento en el que se desarrolla el debate, de modo que no tienda a declinarse por la postura de uno de los dos grupos participantes.
Los puntos que un moderador vaya a considerar para ser tratados durante el debate de un tema deben enfocarse en quienes participan de él, esto quiere decir que, si se trata de un debate escolar o institucional, el tema debe encontrar soluciones a una problemática, mientras que, si se trata de un debate político, el moderador debe permitir a cada participante el dar a conocer sus propuestas y evitar la confrontación.
¿Qué pasos seguir para moderar correctamente un debate?
Un moderador debe considerar que, sin importar el tema que se esté tratando en un debate, este debe enfocarse a los siguiente:
- Establecer turnos y tiempos de participación luego de la presentación de cada participante.
- Establecer las reglas del debate y darlas a conocer al inicio de su desarrollo.
- Evitar el protagonismo y limitarse a guiar y establecer el orden.
- Procurar que cada participación respete su tiempo de intervención.
- Calmar al público asistente y darles la oportunidad de aclarar sus dudas en la ronda de preguntas.
Si se siguen todos estos pasos, un debate saldrá tal y como se había planificado, no se dará lugar a confrontaciones físicas ni verbales y, por el contrario, se podría llegar a establecer un consenso entre las posturas para encontrar una solución o para ayudar al público asistente a tomar una postura.
Tanto el moderador como el debate deben ser imparciales y desarrollarse del modo más adecuado posible, esto implica el respetar las reglas, los tiempos y los turnos. El público solo puede intervenir durante la ronda de preguntas y, de ser posible, se pueden llegar a definir algunas conclusiones destacando los puntos positivos de cada postura.